El equipo de EXNOVO dio la bienvenida al 2019 en una nueva oficina ubicada justo detrás de la Casaramona- Caixa Forum, en Rabí Rubén 14– una pequeña calle envuelta en misterio y llena de historia que data de 1073.
La historia de Isaac Ben Reuben Izchaq ha-Barkeloni, un poeta barcelonés de ascendencia judía y el autor de muchos poemas que contribuyeron a la literatura litúrgica. Después de su muerte, el Rabino Rubén fue enterrado en el cementerio judío en Montjuïc ubicado en el mismo barrio, el motivo por el cual la calle recibió su nombre.
La historia de este lugar no termina en el siglo XI…
Hay otra cosa muy interesante de esta calle, que sorprende no solo especialistas del sector inmobiliario.
Después de la guerra civil española en 1939, uno de los propietarios del edificio, Juan Bautista Pardo, recibió un permiso del Ayuntamiento de Barcelona para ampliar una planta de su edificio basándose en un plan hecho a mano. No sería tan interesante si no fuera por el hecho de que el edificio se da de bruces con otro bloque de apartamentos situado a pocos metros de distancia. Esto significa que los vecinos de un edificio pueden básicamente cruzar el balcón y entrar en el piso vecino desde la dirección opuesta. Lo absurdo de esta construcción y la falta de su funcionalidad sorprenden incluso a los laicos sin ningún conocimiento de las leyes de la construcción.
En esta calle histórica, encontramos un local perfecto para los miembros de nuestro equipo, donde nos complacerá dar la bienvenida a nuestros clientes, a los habituales y a los nuevos. No es un lugar típico para montar una oficina. A pesar de su proximidad a uno de los lugares más emblemáticos de Barcelona y al centro comercial más espectacular, aún conserva su carácter local. En este barrio todavía se puede encontrar tiendas no enfocadas sólo a turistas, donde los vecinos pueden comprar pescado fresco y carne sin envasar; carpinterías; ferreterías y tiendas de frutas. Por eso, nos sentimos especialmente conectados con este lugar y con nuestro rincón pequeño y tranquilo. Este local que, de manera similar a la calle en que se encuentra, está lleno de historia, tradición e historias familiares.
Para preservar el espíritu de este local, decidimos mantener sus muebles, máquinas de escribir antiguas y otras antigüedades que le dan a este sitio un sentido de apego a la tradición y al paso del tiempo. Nuestro objetivo era combinar este toque tradicional con elementos modernos que reflejaran el punto de vista de nuestra empresa: el respeto por la historia y la tradición combinados con un enfoque innovador y creativo.
Para lograr este objetivo, contratamos a un arquitecto con mucha experiencia- Sander Cornelius Laudy (arquitectos B01), que realizó nuestra visión y revivió este lugar con un toque elegante, creando un espacio de trabajo abierto, que es funcional y moderno al mismo tiempo. Logró este efecto al introducir elementos como una gran mesa de trabajo, un jardín vertical y estantes de pared, una solución que le da una sensación de espacio y modernidad. Para nosotros esto significa que podemos trabajar juntos en una mesa, comunicarnos más efectivamente, integrarnos y aprender unos de otros. La pared con el jardín natural de 6 x 4 metros limpia el aire y tiene propiedades relajantes, creando un ambiente de trabajo perfecto.
Ahora, no solo trabajar es más placentero, sino también desplazarnos hasta la oficina. Tenemos un parking para bicicletas, instalado en el centro de la oficina donde podemos colgar y cargar la batería de nuestras bicicletas. Resultó ser una solución extremadamente práctica que nos ayuda a mantenernos en forma, evitar el tráfico por la mañana y proteger el medio ambiente.Además de proporcionar un espacio de trabajo cómodo, nuestro arquitecto propuso estrategias sostenibles como cambiar una certificación energética de «D» a una «A», al reemplazar las ventanas y aislamientos, reemplazar luminarias con luces LED e introducir un sistema de control de clima eficiente para reducir el consumo. Además, hemos instalado un sistema de calefacción y refrigeración muy eficaz y hemos sustituido una gran ventana por una carpintería de aluminio con puente térmico y doble rotura de cristales. Con este sistema, hemos logrado alcanzar una certificación energética «A».
Al realizar este proyecto, abandonamos un concepto estándar de un diseño de oficina típica para tener una zona de trabajo común y sostenible, sin sentido jerárquico, donde nos sentimos animados para intercambiar ideas libremente y expresar nuestra creatividad. Creemos que trabajar en un ambiente familiar es más efectivo, menos estresante y tiene más beneficios positivos. Lo mismo ocurre con la presencia de animales, el motivo por el cual Quim, nuestro pequeño asistente de cuatro patas, tiene un papel muy importante en nuestro equipo.